Hoy 10 de mayo, los mexicanos celebramos al ser más importante, a aquella persona que nos dio la vida y nos cuida, protege y ama, me refiero claro a nuestra madre.
Aprovechemos el día de hoy para ir a visitarla, ya sea en su hogar o en algún cementerio y festejarla llevándole flores, llevándola a comer o con algún pequeño detalle que las haga sentir felices.
Felicidades a todas las madres mexicanas, en especial a la mía, a la que quiero tanto.
Aunque recuerden que el día de las madres debería ser siempre, ya que ellas siempre están ahí, dispuestas a apapacharnos y nosotros debemos hacer lo mismo aunque sea una vez al año.
Amado Señor, en tu palabra, nos  enseñaste a honrar a nuestras madres. En este día tan especial, te damos  gracias y oramos por  todas las madres.  Acompáñalas en todo momento. Pon en cada madre el amor y conocimiento de  Dios para que se lo enseñen a sus hijos/as, ya que no hay mejor  herencia para un hijo o hija que la de fe y esperanza en las promesas de  Jesucristo. Bendice a las madres cuyos hijos/as están lejos en este  día. Anímalas en la ausencia. Si la distancia causa tristeza, haz que  los corazones se unan por el amor de Jesucristo.  
Amén.

